Fueron los autores de esa época, especialmente los cómicos, los que no comprendieron que hubiera podido haber una mujer de valía en épocas pasadas y, como consecuencia de ello, inventaron esa mitomanía sobre la homosexualidad de Safo. Incluso inventaron el verbo λεσβιάζειν [lesbiátzein] (comportarse como la de Lesbos), para significar la relación erótica entre dos mujeres, que siempre existió en Grecia, aunque, al contrario de la que existía entre hombres, permaneciese en la oscuridad y estuviese mal vista. Safo no fue homosexual: fue una buena poetisa que destacó en su época.
Puede comprobarse lo que digo en:
Alsina, José, Literatura Griega. Contenido, problemas y métodos. Ariel, Barcelona, 1967, que dice:
Es sabido que existe una cuestión “sáfica”, que se plantea en el sentido de si la poetisa de Lesbos tuvo o no desviaciones sexuales.
He leído en algún lugar que hay quien ha tildado de homófobo el texto de Alsina. Tengo que recordar que el texto de Alsina es de 1967 y refleja el pensamiento y la forma de escribir de ese año. Lo pasado no se puede cambiar. Por lo que respecta a Alsina, añado que fue durante muchos años Catedrático titular de Filología Griega de la Universidad de Barcelona, y yo disfruté mucho con sus clases. Hay que suponer que el profesor Alsina conocía a Safo bastante más que todos nosotros juntos.
También en el mejor libro que conozco sobre Safo:
Wolfgang Schadewaldt (1900-1974):
“Sappho. Dasein in der Liebe” ["Safo. Existencia en el amor"] (1950)
Un buen estudio sobre el Amor y Safo puede leerse en:
http://www.raco.cat/index.php/Scriptura/article/view/94183/142463
. ..............................SAFO. Atenas: Museo Arqueológico Nacional
Seguiré diciendo poetisa cuando me refiera a Safo y poeta cuando me refiera a Catulo, que era un admirador suyo y tradujo al Latín su mejor poema. Los Griegos distinguían perfectamente entre "poeta” y “poetisa". Cito dos ejemplos:
Σαπφὼ ἡ ποιητρία τὸ μὲν γένος ἦν Λεσβία, πόλεως δὲ Μιτυλήνης
(Safo la poetisa era Lesbia de nacimiento, de la ciudad de Mitilene).
Ἄρατος ὁ ποιητὴς γένει ἦν ἀπὸ Σόλων τῆς Κιλικίας
(Arato el poeta era procedente de Soli, en Cilicia).
Es lo que puede leerse en la mejor biblioteca clásica que conozco en Internet, por citar unos textos accesibles a todo el mundo.
http://www.hs-augsburg.de/~Harsch/graeca/Auctores/g_alpha.html
............................. Mapa de la Isla de Lesbos
Yo, que me he leído repetidas veces en Griego y he consultado las mejores traducciones de lo que nos ha llegado de Safo, que es una ínfima parte de lo que escribió, puedo afirmar que en toda su obra conservada no se atisba ni un solo indicio de que ella fuese homosexual. Ocurre todo lo contrario.
SAFO: Antikemmuseum, München
También he leído en alguna parte que nada podemos afirmar sobre con quién se acostaba Safo. Por supuesto que nadie puede saber con quién se acostaba Safo. Creo que eso no tendría interés ninguno para nadie más que para ella. Y también para quien compartiese su cama. Ese dato ni añadiría ni quitaría valor a sus poemas. Yo sólo puedo citar un poema suyo:
D. 94
(Snell)
Hephaest. Ench. 11, 5 (p. 36 Consbruch)
Δέδυκε μὲν ἀ σελάννα
καὶ Πληίαδες· μέσαι δὲ
νύκτες, παρὰ δ᾽ ἔρχετ᾽ ὤρα·
ἔγω δὲ μόνα κατεύδω.
Se han puesto ya la luna
y las Pléyades. Es media noche.
Pasa el tiempo.
Y yo sigo durmiendo sola.
El texto se puede encontrar, en Griego, en:
http://www.hs-augsburg.de/~Harsch/graeca/Chronologia/S_ante06/Sappho/sap_me05.html
SAFO: Fresco de Pompeya. Museo Arqueológico Nacional de Nápoles
Aquí tenéis el poema mejor suyo, el que fue fielmente traducido al Latín por el poeta Romano Cayo Valerio Catulo, en el que se expresan de forma explícita, por vez primera en Occidente, los síntomas físicos que se perciben y que se apoderan de uno en el momento del enamoramiento. El poema está escrito en Estrofas Sáficas, que son una combinación de versos que recibieron ese nombre por haber sido inventada precisamente por Safo:
Me parece igual a los dioses ese
hombre que ahora está frente a ti sentado,
y tu dulce voz a tu lado escucha
mientras le hablas
y tu amable risa; lo cual, te juro,
en mi pecho el alma saltar ha hecho:
pues te miro apenas y mis palabras
ya no me salen
se me queda rota la lengua y, suave,
por la piel un fuego me corre al punto,
por mis ojos ya nada veo, y oigo
sólo un zumbido,
me destila un frío sudor y entera
un temblor me apresa, y cual la paja
amarilla estoy y mi muerte siento
poco alejada.
Pero todo habrá que sufrirlo, incluso...
Traducción en:
http://caiusiuliuscaesaraugustusgermanicus.iespana.es/safo/poesia.pdf
[Φαίνεταί μοι κῆνος ἴσος θέοισιν
ἔμμεν᾽ ὤνηρ, ὄττις ἐνάντιός τοι
ἰσδάνει καὶ πλάσιον ἆδυ φωνεί-
σας ὐπακούει
καὶ γελαίσ‹ας› ἰμέροεν. τό μ᾽ ἦ μάν
καρδίαν ἐν στήθεσιν ἐπτόαισεν.
ὢς γὰρ ἔς σ᾽ ἴδω βρόχε᾽, ὤς με φώνη-
σ᾽ οὖδεν ἔτ᾽ εἴκει,
ἀλλὰ κὰμ μὲν γλῶσσα ἔαγε, λέπτον
δ᾽ αὔτικα χρῶι πῦρ ὐπαδεδρόμακεν,
ὀππάτεσσι δ᾽ οὖδεν ὄρημμ᾽, ἐπιρρόμ-
βεισι δ᾽ ἄκουαι,
ἀ δέ μ᾽ ἴδρως κακχέεται, τρόμος δέ
παῖσαν ἄγρει, χλωροτέρα δὲ ποίας
ἔμμι, τεθνάκην δ᾽ ὀλίγω ᾽πιδεύης
φαίνομ᾽ ἔμ᾽ αὔται·
ἀλλὰ πᾶν τόλματον, ἐπεὶ +καὶ πένητα]
El texto se puede encontrar, en Griego, en:
http://www.hs-augsburg.de/~Harsch/graeca/Chronologia/S_ante06/Sappho/sap_me01.html
Busto de SAFO. Musei Capitolini de Roma
La enorme poetisa, y digo enorme por la grandiosidad, la inspiración y la audacia de sus poemas, que es Soledad Sánchez Mulas, hizo ayer en su locus amoenus un estupendo homenaje a las mujeres maltratadas. En el comentario, sabroso y valiente, que ha hecho a mi explicación de Safo, ha hecho también un exquisito homenaje a otra mujer, también maltratada en cierta forma, por la Historia. Reivindica, de forma valiente y sólida, la devolución a la gran poetisa Safo del puesto que le corresponde, situándola en las cimas de la producción poética, sin ulteriores connotaciones. Es el comentario que ha tenido a bien hacer a mi exposición. Aquí lo tenéis, por méritos propios, tal cual:
Querido Antonio:
Tu post de hoy me parece absolutamente delicioso. Desde que te conozco, he ahondado en la figura de Safo, pues alguna vez, como siempre desde tu generosidad, has comparado mis humildes versos con los suyos. Ni me aproximo, por supuesto... son tan bellos, que me conformo simplemente con leerlos, y, a mi modo, sentirme tan POETISA como ella.
Yo también he leído encendidos comentarios en pro de su homosexualidad... y como tú, opino que la historia es la que es, y que no sirve querer adecuarla a los sentimientos o necesidades de cada quien.
Efectivamente, la vida sexual de cada persona es la que cada uno lleva a la práctica, en su intimidad... o no. Ha de ser algo natural, y me temo que abanderar una determinada opción sexual no es relevante para nadie. En ninguno de sus poemas Safo declara sus inclinaciones sexuales, solamente deslumbra con unos versos bellísimos, que han de disfrutarse con la mente abierta. No creo que a Safo le gustase ser recordada por encima de sus versos... y mucho menos por sus preferencias sexuales.
Siempre te agradezco que me descubras nuevos aspectos de nuestros queridos clásicos, y creo que hoy le has hecho un gran honor a Safo: validar su indiscutible calidad literaria fuera de cualquier círculo cerrado que pretenda "apoderarse" de su perfil.
Un beso, maestro, y gracias.
Soledad.
Muchas gracias, querida Soledad, por tu generosidad al referirte a mí, con elogios que seguramente no merezco, aunque sé que están hechos con el corazón en la mano. Tienes que saber que la admiración es recíproca.
Desde aquí te envío, yo también, un beso.
Antonio
8 comentarios:
He leído el texto con gusto y la poesía me ha encantado.
Un saludo con mi afecto.
Carmen
Estupenda entrada, me gustó mucho.
Bicos
Querido Antonio:
Tu post de hoy me parece absolutamente delicioso. Desde que te conozco, he ahondado en la figura de Safo, pues alguna vez, como siempre desde tu generosidad, has comparado mis humildes versos con los suyos. Ni me aproximo, por supuesto... son tan bellos, que me conformo simplemente con leerlos, y, a mi modo, sentirme tan POETISA como ella.
Yo también he leído encendidos comentarios en pro de su homosexualidad... y como tú, opino que la historia es la que es, y que no sirve querer adecuarla a los sentimientos o necesidades de cada quien.
Efectivamente, la vida sexual de cada persona es la que cada uno lleva a la práctica, en su intimidad... o no. Ha de ser algo natural, y me temo que abanderar una determinada opción sexual no es relevante para nadie. En ninguno de sus poemas Safo declara sus inclinaciones sexuales, solamente deslumbra con unos versos bellísimos, que han de disfrutarse con la mente abierta. No creo que a Safo le gustase ser recordada por encima de sus versos... y mucho menos por sus preferencias sexuales.
Siempre te agradezco que me descubras nuevos aspectos de nuestro queridos clásicos, y creo que hoy le has hecho un gran honor a Safo: validar su indiscutible calidad literaria fuera de cualquier círculo cerrado que pretenda "apoderarse" de su perfil.
Un beso, maestro, y gracias.
Soledad.
Desde cuanto tiempo atras, se viene ejerciendo 'violencia de genero' en forma de agravios, comentarios maliciosos, discriminacion de todas formas.
Aplausos para ti desde la Costilla Incomoda.
Querido y admirado Antonio, pues la figura de Safo se me antoja básica para la comprensión de la historia de la poesía, siendo así que el contenido amoroso se queda estigmatizado durante versos y versos en los siglos que reúnen la universal temática.
Su reflejo queda inmortalizado en poemas como los que nos muestras, fuente de la beben tantos y tantos poetas.
Así pues, la consideración del ser amado como un ser idealizado, tanto afecta a nuestras emociones, sintiéndonos identificados en la adoración de quien nos hace temblar.
Es muy oportuna y mágicamente inspirada tu explicación sobre el malentendido actual del concepto del vocablo "sáfico". Maravillosa también tu referencia a Alsina, maestro de filólogos, así como fundamentalmente la contextualización que brillantemente haces de él.
Definitivamente una entrada para gozarse de la mano de las estrofas sáficas del delirio amoroso.
Y todo gracias a ti admirado Maestro. Un abrazo enorme.
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Mi querido Antonio:
Es ésta una entrada desbordante de genialidad, belleza, poesía, dulzura, comprensión histórica, impecable exposición desde la Grecia de los siglos VII y VI, la Grecia clásica hasta, volando en los siglos, la realidad de la posguerra española.
Fantástica aclaración sobre la falta de realidad histórica y la carencia de rigor en el uso del calificativo "sáfico", quizás utilizado peyorativamente en tantas ocasiones, cuando parece que la grandeza de una poetisa se midió por el rasero de la envidia y del prejuicio entre algunos comediógrafos de la época clásica de Grecia.
Pues la luz propia e interior seguirá reluciendo a través de los siglos y de todos los comentarios malintencionados, pues, y retomo las palabras de nuestra querida Soledad: ¿quién se atreve a inspeccionar debajo de las sábanas las inclinaciones íntimas de cada persona?
De manera que, la maledicencia sólo lleva al vacío existencial y al conceptual, sin apreciar los valores artísticos y los grandes nombres de la Literatura, nada menos que la Clásica y , definitiva, la universal.
Pero así como las lenguas que se estructuran en un filo doble y rasgan la envoltura física, que no un alma humana pues tal no parece hacerse presente, en mil pedazos, sean los elevados, místicos, geniales poemas de Safo los que reluzcan por la eternidad de amor y estrellas. Sea:
Nos ofreces un primer poema que es tan breve cuanto inspirado, brillante y cósmico en su concisión. Así, la poetisa, cuya voz parece identificarse con la primera persona cuya voz escuchamos en el poema, siente la soledad de su pequeñez en el cosmos grandioso. La Luna y las Pléyades asumen personalidad propia y su propia existencia fría en el universo infinito aparece plena de sentimientos, merced a que la autora transmuta su propia sensibilidad en mágico vuelo a las figuras astrales.
El cielo que parece ponernos delante de nuestros ojos se vuelve un lugar cálido y vivo, humanizado, pues la poetisa ejerce el papel mágico del demiurgo en la creación. Incluso llega a trasladar los sentimientos que ella conoce a los astros, cuerpos celestes, mientras en su contemplación ya es ajena a los mismos, y siente únicamente la soledad bajo las constelaciones y la luna sensual.
Toda una teatral puesta en escena desde las palabras de la gigante poetisa.
El segundo poema, maravilla de descripción del estado anímico del o de la que ama, en este caso, continúa dibujando el tono misterioso y temeroso del enamorado desde la incertidumbre.
Nos remontamos con nuestra poetisa a los siglos VII y VI A.C, y por tanto temblorosa es nuestra mirada sobre la influencia que estos versos tendrán en la Historia de la Literatura. Sentimientos universales que hemos de encontrar a la vez en la tradición de la poesía islámica, como en "El collar de la paloma" de Ibn Hazn, del siglo XI.
Los sentimientos del amante desde Safo, recogiendo también otras tradiciones como la islámica mencionada, pasarán a la poesía trovadoresca provenzal, desde la cual una voz masculina la brinda su vida de amor no correspondido a su amada, a la que le ofrece pleitesía, cual si de un señor feudal se tratase, el pacto de vasallaje se hará pues desde términos amorosos. Poesía trovadoresca que llegará a los humanistas del XIV, entre ellos Dante con su "dolce stil nuovo" cantando a su amada Beatriz, y el inmenso Petrarca que desde su Canzoniere y no alejado de esta tradición, dedica su vida y su obra a su amada Laura. Influencias que llegarán a nuestro Renacimiento, cómo no recordar a Garcilaso de La Vega y su amor rendido por Isabel Freire, amor imposible, por ser ella una dama casada como lo era Laura, la musa de Petrarca. Desde la escuela garcilasista, Herrera con la luz de Leonor, los poetas barrocos que la mantienen.... esta tradición llega hasta nuestros días.
(Continúa en otro comentario)
(Continuación)
La enamorada Safo queda paralizada, privada del don de la palabra, sólo temblorosa ante la cercanía del hombre amado, mientras la idealización ya planea en el universo creado en sus versos, pues su amado "es semejante a los dioses". Idealización universal, quizás la primera referencia poética de la que tengamos constatación.
El sentimiento del amor expresado en los contrarios, a través del glorioso oxímoron, figura retórica que será tan querida por los poetas trovadorescos y toda la tradición posterior, toma unos tintes sublimes en el fuego interior que la posee, mientras un sudor frío la recorre y un temblor.
Gloriosos contrarios, imposible no pensar en Quevedo, extraordinario amante del oxímoron y de la paradoja "nadar sabe mi llama el agua fría".
Amén de la descripción lírica del amor como fuego que recorre el alma y la piel, que durante siglos ha quemado a tantos poetas como quemó a nuestra Safo y que trasladada a los místicos es un metáfora también muy querida, así las "lámparas de fuego" en San Juan de la Cruz. ¿Pues que describe la unión del amor místico del poeta con la divinidad, sino el mismo amor, pero en este caso mundano, que sentían otros amantes más carnales hacia sus amados o amadas?
Y es esta gigante lírica la que inaugura este proceso. No se me ocurren más palabras, sino que es mucho fuego el que arde también en la llama mística de este blog, de este espacio iluminado, siempre con la presencia de los clásicos a quienes se les ofrece su merecido lugar en el cosmos. Igualmente te agradezco las referencias bibliográficas, tan oportunas y eruditas.
Mi querido Antonio, Maestro, mi admiración, mi beso gigante de cariño cegado por el fuego que aquí se balancea escuchando a los grandes músicos que nos ofreces.
Tu admiradora Ἐλένη.
Esta vez me he quedado maravillaa de los trabajos de Elena Pascual y de tu coleccion privada de pinturas femeninas. Pero sobre todo de los trabajos maravillosos de Elena. ¿Porque no se apoya debidamente a estas artistas y en las muestras se ve tanto bodrio (al menos por aqui)?
Arriba Elena!!
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