IMÁGENES DECORATIVAS

LUGAR DE REPOSO
PARA CULTIVAR EL ESPÍRITU

TÁLAMO NUPCIAL

Matriz,

Me encanta lo que dices en tus dos comentarios últimos. Es la pura realidad. Ayer por la tarde todos nos divertimos mucho, escribiendo lo que nos venía en gana, y bromeando de todo. Eso sí, siempre con elegancia y respeto.

Y ahora te voy a contestar a lo que escribes sobre las madres. Es la verdad. No hay nada más grande que una madre, precisamente la madre que nos parió a todos. ¡Qué bonita es la palabra “parir”!, aunque la gente cree que suena mal y no suele utilizarla.

Y ahora te voy a explicar, en honor a mi madre, y a todas las madres, una confidencia.

Mi madre, que se quedó viuda en 1967 con cuatro hijos pequeños, y, para colmo de colmos, sin ningún tipo de pensión, nos sacó adelante a los cuatro muy dignamente. Ella vivió toda su vida como una Reina y murió en el 2001, también como una Reina. Si haces “clic” en el pie del “Blog”, donde pone “00 MATRI MEAE IN MEMORIAM…” (EN RECUERDO A MI MADRE…), podrás escuchar el Coro inicial de la Cantata BWV11 (Oratorio de la Ascensión) de Johann Sebastián Bach. Es un coro impresionante, grandioso. Y ahora viene lo importante: en su funeral peleé con el clérigo que oficiaba la ceremonia, para que hiciese sonar esa música y no la música mortecina y deprimente que suelen poner en los funerales católicos. El clérigo se resistía, pero yo, en un momento tan crucial, tuve la osadía de enfrentarme a él y, al final, conseguí que en el Funeral de mi madre sonase uno de los Coros más grandiosos de Bach. Creo que es lo más grande que he hecho en mi vida. Estoy orgulloso de ello. Sea ello en honor a todas las madres, porque, como he dicho antes, no hay nada más grande que una madre.

Y, en honor a las madres, incluyo este comentario también en la ENTRADA principal.

Si quieres leer más cosas sobre las madres, puedes hacerlo en CARTA A UNA AMIGA DE UN AMIGO INVISIBLE dentro del apartado SOLILOQUIOS de este “Blog”.