INTERMEDIO: LAS IDUS (Así en femenino, no "LOS IDUS", como suele decirse)

Calendario Romano con las KALENDAS, NONAS, IDVS


En el calendario Romano más primitivo, la fórmula de cómputo del tiempo eran los meses, pero eran meses lunares, es decir de unos veintiocho días, que es lo que tarda la luna en dar la vuelta a la tierra, y es lo que dura, también aproximadamente, el “ciclo” de las mujeres. Como expertos agricultores que eran al principio los romanos, debían de tener muy en cuenta las fases de la luna, porque, según las creencias populares, la luna influye en la agricultura y también en la fecundación de algunos animales. Yo mismo he escuchado de pequeño de agricultores que el hecho de que nazca, en algunos casos, un animal macho o hembra depende de la fase de luna en el momento de la fecundación, y muchos agricultores tienen muy en cuenta la fase de la luna a la hora de sembrar, por ejemplo, ajos o habas.

Posteriormente, en la Época Clásica, con la reforma de Julio César, el año 46 aC., asesorado por un astrónomo griego, Sosígenes de Alejandría, el calendario se quedó casi como el que tenemos ahora, con la excepción de la reforma Gregoriana, que hizo el Papa Gregorio XIII en 1582, consistente ésta en que de los múltiplos de 100 sólo serían bisiestos los que al mismo tiempo lo fueran de 400. Es la diferencia que hay entre el calendario Juliano, en los territorios no cristianos, y el nuestro actual, que es el Gregoriano.

En ese calendario lunar primitivo romano sólo había diez meses, pero, como faltaban días para completar el tiempo que tarda la tierra en hacer su órbita alrededor del Sol, en el invierno añadían los meses o días que hiciera falta, para acoplarlo todo. Era el “Summus Pontifex” quien tenía esa facultad.

Volviendo al principio, LAS IDUS correspondían a la luna plena, al plenilunio, y eran días siniestros, de malos augurios. En ellos se producían, creían ellos, fenómenos extraños, como la licantropía (conversión de hombres en lobos). En la Época Clásica, desprendidos y olvidados ya de los orígenes, LAS IDUS eran el día 13 de cada mes (quizá venga de ahí la mala fama que tiene el número 13), con la excepción de Marzo, Mayo, Julio y Octubre, que eran el 15.

Si Julio fue apuñalado en el Senado LAS IDUS de Marzo del 44 aC., lo fue el día 15.

Sobre etimologías y lo que he explicado al principio: la palabra “mens-truación” procede del Latín “mensis” [mes] y la palabra “meno-pausia” procede del Griego μήν-μηνός [mén-menós] [mes].

Todos sabemos que en “esos” días se producen cambios en las mujeres. Un buen tema de investigación sería averiguar hasta qué punto la luna influye en todo ello. Bien conocido es que, muchas veces, el “saber” popular llega incluso más lejos que el de los científicos y la Ciencia.

Más datos se pueden encontrar en:
http://club.telepolis.com/pastranec/interesantes/calenjul.htm